04 de Septiembre de 2024 - 15:55

Enarsa duplicó su masa salarial, retrasando a empleados de carrera y pagándole sueldos millonarios a ejecutivos que estaban jubilados

El informe del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ante el Congreso, blanqueó que ENARSA más que duplicó su masa salarial, pasando de 278 a 597 millones de pesos por mes. Además, reemplazando gerentes que ganaban $ 4 millones por otros que cobran el doble. "Es el club de amigos de Carlos Bastos", se queja un empleado histórico, "y todo con la nuestra", agrega. 

En una clara contradicción con el discurso oficial, en ENARSA no hubo motosierra ni ajuste, sino todo lo contrario. Según el informe presentado hoy por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ante el Congreso, la masa salarial mensual pasó de 278,7 millones de pesos en 2023, a 597 millones para agosto de este año. Un incremento superior al 114%, muy por encima de la inflación acumulada en 2024, que será cercana al 90% cuando se conoce el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de agosto.

Para colmo, esta suba de gastos no favoreció a todos los empleados de la energética estatal, sino principalmente a los llegados con el nuevo gobierno, sobre todo de la mano de Carlos Bastos, quien hoy cobra más de $ 70 millones mensuales como director de YPF. "Sobre todo en el área de gas y gasoductos, echaron gerentes que ganaban alrededor de $ 4 millones, designando a otros con sueldos que son el doble", apunta una fuente que conoce bien el tema. 

De acuerdo al informe de Francos, en la respuesta a la pregunta 537, en agosto ENARSA gastó $ 597 millones en masa salarial, destinada a 324 empleados. Estos datos muestran un recorte de 51 personas desde 2023 (cuando eran 375), además de un sueldo promedio superior a 1.840.000 pesos. Pero el reparto no fue meritocrático sino producto del amiguismo político, una de las lacras de la casta que -se supone- el gobierno de La Libertad Avanza venía a desterrar.

 

Carlos Bastos, benefactor de amigos ("con la nuestra")

 

El ex secretario de Energía, durante la presidencia de Carlos Menem, sonó para ocupar el mismo cargo en la gestión de Javier Milei. Sin embargo, pidió por un destino más rentable: director de YPF, donde cobra un sueldo mensual superior a $ 70 millones, muy por encima de la media del sector petrolero. Sin embargo, el actual secretario de Energía llegó al cargo por consejo suyo, como también muchos directivos actuales de ENARSA.
Eduardo Rodríguez Chirillo, que estaba viviendo en España hasta ocupar su cargo actual, fue asesor de Bastos en la secretaría de Energía de los ´90. Otros dicen que era su jefe de gabinete de asesores. En cuanto a ENARSA, "no hay muchos libertarios, pero sí copó la banda de Carlos Bastos. Muchos son ex gerentes que estaban jubilados, y ahora cobran sueldos muy por encima del promedio en la empresa".

En este feliz listado se cuenta, por ejemplo, a Horacio Amartino, director de la Unidad de Ejecución de Gasoductos, que estaba jubilado luego de trabajar mucho tiempo en Techint. También volvió del retiro, o del túnel del tiempo, Oscar Álvarez, gerente de Gasoductos y también ex Techint. En el listado de los recién llegados con sueldos altos se cuentan Ximena Valle, directora de Legales, y Pedro Sanguinetti, director de Obras. 

En la plana mayor de la compañía, en tanto, está el presidente Juan Carlos Doncel Jones, que ya trabajó en la misma durante la presidencia de Mauricio Macri, y los primeros meses del mandato de Alberto Fernández. Este ex Cardenal Newman (la escuela secundarioa a la cual fue Macri) tiene experiencia en el sector, sobre todo representando al sector privado, y también es socio del estudio jurídico Conte-Grand. 

El vicepresidente de ENARSA, por su parte, tiene dos particularidades: es chileno y arrastra problemas judiciales. Rigoberto Mejía Aravena -de él se trata- está siendo investigado por su gestión anterior -Era Macri- en ENARSA, cuando firmó un memorandum con la brasileña Petrobras, conocido como Swap de barcos de GNL a cambio de gas que se importaba desdse Bolivia. El problema es que habría un posible caso de conflicto de intereses, ya que Mejía Avena fue director de la petrolera brasileña. Además estuvo en el ojo de la tormenta en 2019, cuando un grupo de diputados lo denunció por la venta a precio vil de las centrales termoeléctricas.

Comentarios