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Juan Román Riquelme posterga su asunción como nuevo presidente de Boca, tras imponerse en las elecciones del pasado 17 de diciembre. La ceremonia de jura estaba prevista para este martes a las 19 en la Bombonera, pero finalmente no se hará.

Este miércoles a las 19 habrá reunión de comisión directiva en el club, y allí se realizará formalmente el traspaso de mando. De esta manera, Jorge Amor Ameal, el actual presidente, pasará a ser el vice y Riquelme el presidente. Además, quedará conformada la nueva comisión con nombres distintos en algunos cargos respecto de la gestión anterior, que fue del mismo signo político.

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El cambio de fecha de la asunción de Riquelme está relacionado con los detalles que faltan por resolver de la contratación de Diego Martínez. Boca dejó trascender a través de una de sus cuentas no oficiales ("Esto es Boca Ok") en las redes sociales, que el club llegó a un acuerdo con el entrenador y que asumirá en las próximas horas.

La polémica por la suspensión de las elecciones en Boca

Los comicios en el club de la Ribera estuvieron atravesados por la interna con Mauricio Macri, candidato a vicepresidente del club en la fórmula opositora junto a Andrés Ibarra. Días antes de la fecha original de las elecciones, que estaban pautadas para el 3 de diciembre, ambos denunciaron que miles de socios fueron habilitados a votar de forma irregular. 

Esa denuncia derivó en la suspensión de los comicios, tras las idas y vueltas en la justicia, y la polémica por los vínculos de una jueza con el macrismo.

"Nos quieren intervenir el club" había advertido Riquelme semanas atrás. El candidato a presidente por la fórmula oficialista recibió el apoyo de una gran cantidad de hinchas que hicieron una manifestación para pedir que las elecciones no se posterguen más.

La jueza Abrevaya tuvo la causa desde el principio, pero fue recusada por el oficialismo y debió apartarse unos días dejándole el lugar a otra magistrada vinculada a Macri que también se retiró de la investigación. Tras una breve asignación a otro juez, finalmente la causa volvió a la jueza original, quien había determinado la suspensión de los comicios. Sin embargo, la justicia falló a favor del oficialismo, y las elecciones pudieron ser llevadas a cabo dos semanas después de los previsto. 

La interna continúa, pero al menos se calmó la incertidumbre que frustraba a los hinchas y socios que esperaban ansiosos la resolución de esta batalla judicial para poder emitir su voto.