Murió Pascual Mastellone, el dueño de La Serenísima
El dueño de La Serenísima y uno de los empresarios más importantes del país, Pascual Mastellone, murió el sábado a la noche, a los 84 años. Sus restos serán velados hasta hoy a la tarde en la planta principal de la empresa, en General Rodríguez.
Oriundo de la ciudad bonaerense de General Rodríguez, “Don Pascual” continuó la empresa fundada por su padre, Antonio Mastellone, luego de que muriera.
Pascual Mastellone era el mayor de seis hijos, nació el 7 de agosto de 1930 y tenía 21 cuando se hizo cargo de la empresa familiar.
Mastellone hnos. fue fundada en 1929 y empezó siendo un pequeño tambo, que producía ricota y mozzarella. En 1960, inició la producción de leche pasteurizdada y, en 1968, presentó la primera leche envasada en sachet plástico, dos innovaciones que llevaron a la marca La Serenísima a ser pionera y consolidarse como una de las dos empresas líderes de Argentina dentro de la industria lechera. En la década del 70, Mastellone fue la primera empresa nacional en producir leche en polvo.
En 1996, Mastellone hnos. se asociació con el grupo francés Danone, que se quedó con los negocios de postres y yogures.
También fue uno de los pioneros en el desarrollo de la logística de frío para distribuir productos lácteos y frescos en todo el país.
La Serenísima en una marca emblemática de la industria alimenticia argentina y Mastellone en una de las empresas más influyentes dentro la política y la economía local.
Aunque su intención era seguir comandando la compañía hasta los 88 años, Mastellone pidió licencia dentro del directoria en julio del año pasado, por sus problemas de salud. Desde ese momento, la compañía quedó a cargo del vicepresidente, José Moreno.
Tras su fallecimiento, la familia del empresario destacó el “tesón, la fortaleza y la energía inagotable” de Pascual Mastellone, en un comunicado.