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En el momento de escribir estas líneas, Lampropulos, conocida en el circuito como “Connie”, se coloca por delante de un trío de jugadores procedentes de la que hasta ahora había sido la gran potencia del póker sudamericano: Brasil. Esta bonaerense de 36 años ha desbancado a estrellas como Felipe Tavares Ramos “Mojave”, finalista en las mesas de los mejores torneos del mundo, y a sus compatriotas João Pires y Rafael Moraes. En la quinta posición se encuentra el colombiano Farid Jattin y tras él otros tres argentinos, en un ranking dominado principalmente por brasileños. Nacho Barbero, pionero y veterano jugador, Iván Lucá, considerado en su momento uno de los mejores del mundo y pareja sentimental de Lampropulos, y Richard Dubini, ocupan de la sexta a la octava plaza.

Esta clasificación se formula en base a los resultados conseguidos en torneos presenciales, los “de toda la vida”. María Lampropulos alcanza el número 1 después de dos victorias extraordinarias, una el año pasado y otra a principios de éste. Original de Buenos Aires, Connie comenzó a interesarse por el póker después de observar y acompañar a su novio por torneos de todo el mundo hace poco más de tres años. Empezó a participar en eventos más modestos que los que jugaba Lucá hasta que sintió la confianza de poder competir al mismo nivel. El punto de inflexión llegó en 2016, cuando se llevó la segunda plaza del Evento Principal del Eureka 6 Rozvadov en la República Checa, siendo superada únicamente por Lucá. Tras un cara a cara insólito protagonizado por una pareja sentimental, finalmente fue él quien se llevó el trofeo, pero ya se empezó a ver que Lampropulos era mucho más que una mera acompañante del puntaltense.

El gran salto lo dio en 2017, cuando se convirtió en la primera jugadora argentina en lograr un premio de más de un millón de dólares. Lampropulos ganó el partypoker MILLIONS de Nottingham, en Inglaterra, y se embolsó una ganancia de un millón de libras esterlinas. Este logro podía haber quedado en anecdótico si no fuera porque a principios de este año, la joven repitió la jugada. El pasado mes de enero, al coronarse en el PokerStars Caribbean Adventure de Bahamas, volvió a superar el millón: us$1,081,100. Además de la cuantía del premio, Lampropulos se ganó la satisfacción de haber hecho historia al convertirse en la primera mujer que consigue ganar este campeonato, uno de los más importantes del mundo junto con las World Series of Poker (WSOP), y también de lograr el primer título para América Latina.

María Lampropulos es actualmente la mejor jugadora del Continente, hombres y mujeres, y la mejor fémina del mundo. En el ranking mundial de Global Poker Index aparece en el puesto 40 y es la mujer mejor situada. La argentina entra así a formar parte del cada vez más amplio círculo de grandes damas de los naipes.

El juego del póker se ha vuelto enormemente popular en los últimos años, gracias principalmente a su presencia en Internet, y esto ha hecho que el perfil clásico del jugador tradicional haya pasado a convertirse en un simple cliché. Hoy en día esta práctica reúne a un buen número de jóvenes altamente formados, y a su vez, se está empezando a utilizar el póker como herramienta de formación. Un ejemplo lo encontramos en la Universidad de Palermo, donde se ha puesto en marcha un curso que relaciona el póker y la toma de decisiones. Una disciplina muy compleja de la que el máximo exponente en América Latina luce pasaporte argentino.