Tweet 1 COMENTARIOS

En una decisión que sorprendió, el gigante mexicano Televisa vendió Editorial Atlántida, su filial argentina que edita revistas emblemáticos como Gente, Para Tí y Billiken. Aún falta la comunicación oficial, pero el cambio de manos se firmó el pasado 28 de diciembre. En un proceso conocido como management by out, el comprador es Luis Castro, actual CEO de Televisa en Argentina.

Castro pagaría un valor simbólico, pues le quedan más pasivos que activos. Se trata de una empresa con 300 empleados, cuya antigüedad promedio es de 25 años. “Los mexicanos se cansaron de perder plata y de la conflictividad gremial. La contingencia laboral es muy grande, y saben que se impone una reestructuración de la editorial. Así que prefieren dejarle ese proceso a Luis Castro”, aseguró a Minuto de Cierre una fuente que conoce bien la operación.

El activo más valioso de Atlántida, su edificio, queda fuera de la operación. Hace algunos meses, los mexicanos recibieron una oferta de u$s 8 millones por el edificio de Azopardo y México, por el cual a principios de año una inmobiliaria había pedido u$s 10 millones en avisos clasificados, una vía que pareció extraña para una operación de esa envergadura.

El ex Edificio Wasserman tiene inmejorables condiciones para el desarrollo inmobiliario, tanto por características propias como debido a su ubicación. Se accede a sus 9.300 metros cuadrados de superficie tanto por Azopardo (frente de 38,8 metros) como por México (34,5 metros). Además está ubicado a un paso de Puerto Madero, en una zona que se potenciará como polo inmobiliario con el desarrollo del “Paseo del Bajo”, que hará de nexo verde y amigable entre San Telmo y el barrio más caro y más nuevo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Atlántida rechazó la oferta de u$s 8 millones, que daba un ridículo coeficiente de 860 dólares por metro cuadrado. De la misma forma, tampoco parecía real la cotización de 10 millones, que elevaba apenas de los 1.000 dólares el metro cuadrado. 

La jugada es clara: Televisa puede vender el activo más apetecible de su filial argentina, y dejarle el trabajo sucio a Castro. El último año, la casa matriz de Televisa tuvo que girar u$s 10 millones a Editorial Atlántida para equilibrar sus pérdidas. Y había pagado u$s 80 millones para quedarse con la editorial fundada  por la familia Vigil, en el que pudo haber sido el peor negocio que hizo. 

Además de formar parte de un mercado argentino donde la edición en papel difícilmente es rentable, Atlántida carga con juicios laborales millonarios. En 2016 echó a casi 30 empleados con mucha antigüedad, los cuales cobraron su indemnización, pero además hicieron juicios que les podrían resultar favorables.

En Televisa todavía están arrepentidos de no haberle dado el sí a Jorge Fontevecchia, que hace alrededor de una década ofreció comprar la editorial que compite con la suya, Perfil. El empresario, quien hace poco compró Radio América, en ese momento buscaba expandir su cartera de títulos exitosos, entre los cuales se encuentra Caras, Noticias, y el bisemanario (se publica sábados y domingos) Perfil.

El último paso conocido de Televisa en Argentina fue un acuerdo para difundir y potenciar sus contenidos con Infobae, el portal del empresario Daniel Hadad. Una decisión acertada considerando el liderazgo y el posicionamiento de Infobae entre los medios digitales argentinos.