Tweet 0 COMENTARIOS

A través de un comunicado, CARBAP enumeró los principales motivos que llevaron a la lechería a su critico estado, entre las que se destacaron: la devaluación, la suba del maíz del 150% y las cuestiones climáticas que afectaron principalmente a provincias como Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba y, una baja del 30% en el acumulado del precio del litro de leche. Con esto, demostró que “poco o nada se hizo para subsanar la preocupante situación”.

CRA, no se quedó atrás, y advirtió  un incumplimiento de las medidas prometidas por el Gobierno Nacional: la convocatoria a la discusión sistemática de la política lechera; la generación de herramientas de transparencia de mercado y financieras y el seguimiento del SiGlea (el sistema de gestión de la lechería lanzado por el Gobierno para transparentar la cadena): “Seguimos sin saber cuántos tambos cerraron, cuántos tambos quedan, qué industrias y capacidades tienen, para evaluar la competitividad de la cadena”; haciendo hincapié en la pérdida de productividad ya que el 2016  cerrará con una merma del 23% respecto al 2015, al pasar la producción de 11.000 millones a 8500 millones de litros.

Ante las críticas, salió al cruce el subsecretario de Lechería de la Nación, Alejandro Sammartino quien aseguró que “si estuviéramos en los niveles que indica CRA estaríamos importando leche”. Y si bien reconoció una caída en los niveles de producción y exportación, del 10 y 20% respectivamente, rechazó las afirmaciones de las entidades al decir: “bajo ningún punto de vista podemos decir que no hubo políticas” ya que se está “apuntando al crecimiento y apertura de mercados internacionales”.