José Reyes Segade declaró haber dejado su empresa en junio del 2020 pero fue en diciembre de ese año, atendiendo así los “dos lados del mostrador”, pues ya tenía su cargo en la Embajada de Uruguay en la Argentina. Una vieja condena por contrabando, escuela secundaria incompleta y currículum mentiroso. El presidente Lacalle Pou lo niega, pero conocería todos esos antecedentes. La recurrencia del primer mandatario uruguayo en elegir para cargos estratégicos a personas vinculadas a delitos: Alejandro Astesiano, Reyes Segade, ¿y la lista termina ahí?